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Evgeny Sinitsyn, Olesia Sinitsyna

El misterio de la creación de los genios. 

Rusia, Novosibirsk, 2004.

El placer, el sufrimiento y la compasión

 

A. Schopenhauer pensaba que el sufrimiento es positivo, porque solamente la insatisfacción conduce a la sed interminable del conocimiento. Tan pronto como el sufrimiento desaparece, desaparece la existencia; aparece el aburrimiento, y de nuevo nace el sufrimiento.

El mecanismo mental del sufrimiento es difícil para el análisis. Pero si no decir que las personas talentosas (especialmente la gente del arte) tienen una inclinación al sufrimiento, gracias a que experimentan (sienten) el sentimiento extraordinario mezclado - el sentimiento «sufrimiento-placer», es imposible comprender: ¿por qué el sufrimiento es el satélite constante de la vida mental de las personas geniales? La gloria del lord Byron atravesaba las fronteras de los países europeos, su nombre fue sobre la boca de toda la gente culta de aquello tiempo, estaba rico, pero sus sufrimientos fueron increíbles, y su vida fue un desafío a la sociedad. Goethe escribía: «estaba muy apretado en todas partes; a pesar de libertad ilimitada personal, se sentía oprimido, el mundo le parecía la cárcel. Su evasión a Grecia no fue decisión voluntariamente aceptado - a esto le ha movido el desacuerdo con todo el mundo» (cita por 5, p.6).

La vida mental y biológica de la persona creadora se encuentra en el enlace fuerte correlativo con la esfera de sus sentimientos. Descubierto por Freud el principio del placer da el carácter ondulado a los sufrimientos emocionales. Este principio es apretadamente ligado con principio de la economicidad que supone el mantenimiento de la excitación mental sobre el nivel mínimo. Del principio del sufrimiento y del placer resulta la existencia del campo emocional de los sentimientos de la persona. El sufrimiento es la consecuencia de la invencibilidad de la tensión en el sistema mental. Esta tensión provoca el aflujo de las emociones negativas que se transforma gradualmente en el flujo que absorbe todo.              

El sufrimiento inspira, sino también debilita. En el flujo de los sentimientos destructivos se apaga el pensamiento creador y comienza la depresión profunda que debilita la aspiración salir del callejón sin salida  mental y creador. La depresión como y cualquier otro estado mental, tiene dos propiedades, por eso, a pesar de que la depresión debilita, en el proceso creador ella, en realidad, es el elemento necesario y esencial que explica la amplitud alta del sufrimiento con la baja frecuencia (low-frequency) en que fondo intervienen las lanzas raras de los sentimientos que no permiten reprimir el pensamiento creador.

La salida de la depresión puede ser ligada con la acción del irritante fuerte externo que hace instantáneamente estimar de una manera nueva las fuerzas y la situación que existe. La función que estimula del nivel superior del inconsciente prevalece sobre las fuerzas regresivas, entonces proviene una transfusión de la energía mental del campo del inconsciente inferior en el campo de la conciencia superior. En el estado de la incertidumbre excesiva el pensamiento creador se bate en el laberinto de los callejones sin salida interminables, pero la salvación viene entonces, cuando atraviesan tres aspiraciones: la sed del conocimiento - «pienso, por consiguiente, existo», la sed de los sentimientos - «sufro, compadezco, por consiguiente, existo», la sed aguantar el destino - «me rebelo, por consiguiente, existo». Así es puesta en marcha la acción armoniosa de todos los principios del proceso creador en su variedad y la unidad indisoluble, y la mentalidad se libera de las cadenas de la depresión.

El mecanismo del trabajo de la mentalidad de la persona creadora es ligado con el cambio de los procesos cíclicos. Con el aumento de la tensión en el inconsciente, debe suceder el destello deseable, que da a luz el chapoteo de los sentimientos. Luego de nuevo es puesta en marcha la onda de la tensión y de la incertidumbre. Así ondulantemente corre el proceso creador en el océano de los sentimientos diametrales y las sensaciones, perturbando por la vacilación suave de baja frecuencia de la tranquilidad emocional.

La compasión y la simpatía como los principios morales, se apoyan en la conciencia y se resisten al mal. Es imposible compadecer, si es desplazada la conciencia. Éstas esencias de la existencia hay siempre en la unidad inconfundible en el don del genio. Mozart en tragedia de Pushkin («Mozart y Salieri») pronuncia la sentencia al mal y la conciencia desplazada:

 

         Mozart

Él es un genio,

Como tú  e yo. Y el genio y la maldad -

Dos cosas no comunes. ¿No es verdad?

 

En las palabras de dos héroes Pushkin ha metido su comprensión sobre la persona genial:

 

         Salieri

Pero es posible él tiene razón,

¿Y yo no es el genio? El genio y la maldad

Dos cosas no comunes. No es verdad:

¿Y Buonarroti? O es el cuento

Del gentío torpe y absurdo –

y no fue asesino

el fundador del Vaticano?

 

¿Si considerar esta contradicción por manifestación discutible o místico del don genial? Los genios sufren y sienten los sufrimientos de otros agudamente. Pero: ¿quién tiene razón Mozart o Salieri, si recordar sobre adalides geniales que se han cubierto de gloria no sólo por grandeza de las victorias, sino también por crueldad que no tiene el límite?

El sufrimiento inspira y simultáneamente suaviza los reveses de la fortuna y da los impulsos para vivir. En la lucha de esos dos principios - del sufrimiento y de la compasión - pasa toda la creación de los genios. Es posible pensar que en el fenómeno de la compasión se cristalizan inesperadamente los matices distintos de la mentalidad humana. En los mecanismos protectores de la mentalidad es prevista la posibilidad de la adaptación del organismo, cuando la razón prueba la amenaza del castigo de parte de la conciencia. Este fenómeno de la mentalidad fue nombrado por Freud «la alarma moral». Cuando hay un sentimiento de la culpa como la protesta escondida contra los impulsos inmorales, entonces viene el tiempo de la conciencia. Aquí la compasión se hace el criterio en la lucha de las manifestaciones inconscientes de la mentalidad y del principio moral. Esta lucha no pasa a nadie y no depende de la medida del talento. En la colisión de estas hipóstasis de la existencia nacen los chapoteos potentes de la inspiración, ellos luchan uno con otro por la predominancia, alcanzaran las victorias y sufren las derrotas.

 El recogimiento  

 Para gozar las esencias inagotables de la existencia, el genio debe se hallar en el recogimiento salvador. En «Faust» en palabras del poeta Goethe dice sobre un enlace especial del recogimiento y de la inspiración:

                                                                                                    

No, me lleva a aquellas cimas,

Adonde el recogimiento invita,

Allá, donde por mano de Dios son creadas,

La morada de sueños, el santuario de tranquilidad.

 

La eficiencia y la intensidad de la actividad del inconsciente ayuda al genio superar las barreras cognoscitivas psicológicas más rápida y más fácilmente que una persona habitual que es protegida por el conservadurismo de su conciencia. El recogimiento, de lo esencial, es apretadamente ligado con los valores elevados del campo emocional, que como si rodea las estructuras informativas semánticas. El nivel elevado de la coloración emocional de la  información es ligado al recogimiento, y los valores anómalos del campo de las emociones dan a luz el recogimiento.

Uno condiciona el otro. El efecto fuerte del enlace positivo inverso representa en el papel del multiplicador. Uno refuerza el otro. Esto es la parte del mecanismo general de la inspiración de la persona dotada. Con toda probabilidad, la capacidad de concentrarse interviene como uno de mucho componentes necesarios del trabajo productivo creador. El recogimiento es el soporte de la razón, que busca la verdad y guarda del peligro de poner en marcha la intuición en seguida por muchas vías - en todas las direcciones, dispersando la energía mental que es necesaria para la creación. Aquí el recogimiento se une con la obsesión y la voluntad. La influencia del recogimiento sobre el proceso creador se hace tanto más fuerte, cuanto más grande las tentativas de la intuición de romper el sistema defensivo de la razón y se entrega a la voluntad del inconsciente.

Para comprender el fenómeno de la velocidad de la superación de las barreras cognoscitivas psicológicas (BCP), que es característico para la gente dotada, nos dirigiremos a la hipótesis sobre el enlace de los valores anómalos del campo de las emociones con el fenómeno del destello.

Como han aclarado los fisiólogos, en el campo de los valores anómalos del campo de las emociones se acrecienta agudamente  la «antiinhibición» de synapses en neuronas del cerebro.

En el momento de la reconcentración fuerte en el lote local de la estructura intensa semántica se unen en un conjunto único y las fuerzas mentales, y las fuerzas materiales que funcionan  simultáneamente en una dirección de encontrar los elementos nuevos.

La reconcentración que surge sobre el lote local de la estructura semántica, que aspira al desarrollo, es determinada por la tensión fuerte y por la deformación en esta estructura y esto prepara para la ruptura y el salto. Unas imágenes surgen espontáneamente. Pero además el recogimiento uno de los factores más contradictorios del proceso creador. Esta contradicción lleva en sí no la debilidad del proceso creador, y su fuerza. ¿En que ella? Cuando hay una reconcentración en los elementos locales de la estructura semántica, en este momento la energía mental se concentra en el campo de la conciencia, donde surge «la mancha clara». En este estado pasa el impulso al traslado de la «mancha clara» allá, donde se guardan las huellas de la memoria de otra parte de la estructura local (la palabra, las imágenes, la noción y etc.) Se cambia el fondo del campo emocional, aparecen las zonas nuevas anómalas. Nace la cadena de los destellos de impulso.

Se puede interpretar el recogimiento y como el desplazamiento de la conciencia de todo que no entra en la región de la reconcentración. Todas las estructuras semánticas fuera de la región de la reconcentración son desplazadas. Synapses dirigen los impulsos nerviosos, que circulan por las trayectorias numerosas y crean aquella situación de las alucinaciones y las mutaciones, de que hablaba el fisiólogo A.Uhtomsky. Pero que la intensidad de las búsquedas sea grande, son necesarias el aflujo adicional de la fuerza externa de y la movilización completa interna. La idea de Nalimov  dice que el aflujo adicional de la energía mental, necesario para el trabajo productivo creador es realizado con la ayuda del canal del enlace con la metáconciencia cósmica.

En el momento de la inspiración la energía mental enfoca sobre el lote muy pequeño, provocando el fenómeno de la reconcentración y de la búsqueda de radar. Acumulandose y concentrandose en uno lugar, la energía mental aumenta la «diferencia de potenciales» hasta que esta diferencia no alcance la diferencia de umbral y el pensamiento relampaguea, se inflama el sentido nuevo y se forman los elementos de la estructura nueva. Así en el proceso creador se da a conocer el principio de la imagen fija. 

 

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