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el monumento al mariscal Alexander Pokryshkin en Novosibirsk

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

                                                                                                                                                                 

Evgeny Sinitsyn

Alexander Pokryshkin - el genio de la guerra aérea. La psicología del heroísmo

Rusia, Novosibirsk, 2008

El espacio mental

 

Las disputas infinitas entre los especialistas de que - cuál de los ases aéreos es el más fuerte - tropiezan, en realidad, con otra problema - casi no resoluble - como encontrar tales métodos los que podrían ser un medio para comparación los ases aéreos entre sí y los ases aéreos y los pilotos que no fueron los maestros superiores de combate. Este problema de comparación de la maestría engendra inevitablemente muchas contradicciones.

Es paradójico, pero este problema puede encontrar su decisión no en la esfera de los términos habituales militares y las nociones, pero en límites del modo estructural-axial de la psicología el que ha recibido su desarrollo en el libro «El misterio de la creacion de los genios».

Para comprender por qué un piloto de caza gana muchas victorias, y otro, siendo también y valiente y atrevido, con dificultad conquista sus duelos, más a menudo es abatido o derribado, salvando con paracaídas, es necesario comparar las estructuras mentales de sus personas.

De aquí sale ni retórica pregunta: ¿si debería interesar más a un investigador de la psicología del heroismo, cómo pasa un combate aéreo en el espacio físico o, al contrario, un psicólogo debe concentrar su atención cómo el combate pasa en el espacio mental? Como resultado de trasladar de los acentos desde los objetos mecanicísticos en la mentalidad caemos en seguida en la esfera misteriosa y poco investigada en la ciencia psicológica - en el espacio mental.

Encontrandose adentro y describiendo el espacio físico, el sistema de coordenadas supone la presencia de los ejes de coordenadas, en las que trazan con la exactitud más grande o menor las cantidades medidas. Se aclara que se puede adaptar el sistema de coordenadas para la construcción del sistema mental de la persona, al superar la contradicción sobre la imposibilidad exactamente de medir las características mentales de la persona. Para usar el sistema de coordenadas en estudiar la mentalidad de la persona análogamente al espacio físico, introduciremos la noción del espacio mental.

Probablemente, al lector le parece extremadamente arriesgado investigar la conciencia de la persona, usando las nociones matemáticas. Sin embargo este modo hace mucho les se ocurría  intuitivamente a los científicos diferentes. Así, el historiador ruso E.V.Tarle en su libro sobre Napoleón escribía que todavía Napoleón usaba la metáfora original matemática: «Napoleón, con la manera original expresarse, igualaba el complejo de las cualidades del adalid buena al cuadrado, donde la base y la altura siempre son iguales: bajo la base él comprende aquí el carácter, el valor, la valentía, la firmeza, y bajo la altura - la mente, las cualidades intelectuales. Si el carácter es más fuerte que la mente, el adalid se aficionará e irá muy lejos que es necesario. Si la mente es más fuerte que el carácter, al contrario, le falta del valor realizar el plan» (22, p.401). Diagonal del cuadrado de Napoleón esto es un vector cuyas proyecciones son los valores iguales de la mente y del carácter del adalid. Se puede no conformarse con el aforismo de Napoleón, suponiendo que hay unas situaciones las que exigen del adalid para la victoria más de la mente, y del carácter menos, y otras situaciones todo al contrario. Como la variante óptima supondremos tal variante cuando sobre cada eje de coordenadas traza óptimo para dada situación el valor de la fuerza de la mente, y sobre otro eje el valor óptimo de la fuerza del carácter.

Así, podemos suponer que en la situación concreta en la base de la conducta y en toma de decisión del adalid está aquella cantidad de la energía mental la que echa (afluye) a cada uno de dos factores indicados mentales, y la interacción mutua de estas dos cualidades del adalid explica su éxito y sus fracasos en la batalla. El espacio mental estudia la psicología estructural-axial la que introduce en el objeto de la investigación de la mentalidad de la persona el vector multidimensional que representa los estados mentales de la persona. En el libro «el Misterio de la creación de los genios» era mostrado que los estados mentales de las personas talentosas y geniales en el proceso creador están en la región determinada limitada del espacio mental - en la esfera inaccesible para las personas regulares. En esta esfera hay la multitud de puntos.

 Conservando su esencia matemática, este vector multidimensional se traslada ya no en el espacio físico, y en el espacio mental. El fin del vector es un punto en alguna región. En un punto tenemos un estado mental de la persona, en otro punto - otro estado mental. En realidad, la idea del espacio mental se apoya en la esencia del espacio físico. Así como en el espacio físico el fin del vector representa los estados del objeto físico, también es posible suponer que y en el espacio mental el que representa el continuum de los estados mentales de la persona, el fin del vector representa los estados distintos mentales de la persona.

Por consecuencia, la mentalidad de cada persona puede ser reflejada como un punto en el espacio mental. Sobre este fenómeno de la representación de los caracteres de las personas hablaba E. Fromm en su libro (29). Si dos puntos los que representan dos personas están situados cerca uno de otro en el espacio mental, estas dos personas según el conjunto de los rasgos de la personalidad o de los rasgos del carácter son semejos. La construcción del vector en el espacio mental de la persona pasa análogamente, cómo se realiza esta construcción del vector en el espacio físico. Por ejes del sistema de coordenadas en el espacio físico son trazados segmentos cuya longitud es igual a la cantidad del parámetro medido. Estos segmentos son las proyecciones del vector incógnito. Así, decidimos un problema inverso, encontramos primero las proyecciones del vector, y después por esas proyecciones construimos el vector mismo. Si en el espacio físico las proyecciones del vector son medidas en las cantidades correspondientes físicas, supongamos, en unidades de longitud, en el espacio mental en calidad de las proyecciones del vector es posible escoger los valores energéticos de los rasgos del carácter y los valores de los rasgos de la personalidad en el sistema mental. En el cuadrado de Napoleón la cantidad igual de la energía mental echa (afluye) y a la mente y al carácter. Como mostrado en el libro «El misterio de la creación de los genios» (19), se trata de los valores energéticos de los factores mentales en el complejo autónomo psiconeurofisiológico funcional de la persona (mira http://www.s-genius.ru/vse_knigi/auton_compl_esp.htm ).

Cuando hablamos sobre el sistema mental, tocamos implícitamente la actividad de este complejo autónomo de la personalidad. En el sistema mental la unidad de la dimensión de los valores de los rasgos de la personalidad y los valores de los factores concretos mentales es la cantidad de la energía que echa (afluye) en la situación dada a los rasgos concretas de la personalidad y los factores concretos. La energía mental puede concentrarse, por ejemplo, sobre tales rasgos de la persona: la compasión, la capacidad del liderato, el valor, la racionabilidad, el recogimiento, la valentía, el sentimiento de la novedad, la espontaneidad. Dos personas pueden distinguirse uno de otro en la cantidad absoluta de la energía mental. Los factores mentales se forman en la conciencia y en el inconsciente. Los factores mentales son responsables por el potencial creador de la personalidad.

Precisamente en presencia o ausencia de los factores concretos mentales y la cantidad de la energía mental que les echa (afluye), consiste una de las diferencias principales de la persona talentosa e genial – de la persona con las capacidades creativas superiores de la persona habitual.

Cada persona tiene la esfera limitada en el espacio mental. En esta esfera pasa la mayor parte de su vida. Las personas distintas funcionan en los espacios distintos o próximos mentales como  funcionan en los espacios distintos o próximos físicos.

Examinaremos un caso abstracto, cuando va un combate aéreo, primero piloto ataca y pasa en la cola al caza enemigo, otro piloto aspira a irse de esta posición peligrosa. En este momento del tiempo dos pilotos se encuentran en una esfera del espacio físico. Pero primero piloto tiene voluntad fuerte, espontaneidad y función mental - la sensación - la que es extraordinariamente desarrollada, él ve claramente los detalles del duelo, siente el avión como su cuerpo, siente todas las relaciones recíprocas de los objetos espaciales del combate. Tal piloto tiene una capacidad de la previsión de la situación. Al contrario, otro piloto tiene la confusión y, como la consecuencia de esto, el debilitamiento de la voluntad y la incapacidad de ser concentrado sobre los detalles del duelo y ver el curso de la lucha adelante. La lucha entre estos adversarios que se encuentran en un espacio físico, será condicionada por la superioridad de primero piloto el que tiene el potencial más grande a la victoria que segundo piloto. En este caso es posible hablar que los puntos que representan las personalidades de esos pilotos en el espacio mental en esta situación de combate, se encuentran lejos uno de otro en el espacio mental.

Hay un simple metodo matemático de determinar la esfera del espacio mental, donde pasa la vida mental y la actividad de la persona. Introduciendo la noción del sistema mental, análogamente, cómo Freud examinaba el aparato mental de la personalidad, se puede estimar la actividad de la persona en su parte individual del espacio mental. Los elementos básicos del sistema mental de la persona son su conciencia y las capas del inconsciente en el que la capa del inconsciente creador ocupa el lugar esencial.

En el sistema mental de la persona hay unas características dominantes las que reflejan objetivamente el estilo individual de su conducta y del pensamiento. Cada persona concreta es caracterizada por sus rasgos individuales de la personalidad. Cuando pasamos a la representación matemática de la mentalidad de la persona como el punto en el espacio mental o hablaremos más correctamente que ni los rasgos diversas de la personalidad caracterizan a la persona, pero los que de ellos son insignificantes y los que de ellos son valores. Esto es evidente, por eso es importante: cuál es valor energético en la personalidad de aquellos o de otros rasgos. Si una persona está valiente, va más pronto a la proeza, si está cobarde, más pronto huirá del peligro. Si la persona está vil, va al acto pérfido y puede ser traidor, si la persona es honesta, se distingue por sinceridad y veracidad en sus actos.

La capacidad de la persona hacia la actividad creadora depende de la cantidad de los valores en su sistema mental de los factores de la creatividad. Cuando hablamos sobre el conjunto de los rasgos de la personalidad y sobre el conjunto de los factores mentales, tenemos en cuenta implícitamente cierta esfera limitada del espacio mental, donde está el vector construido por los valores de los rasgos de la personalidad y los valores de los factores mentales creativos. Cada valor en la mentalidad de la persona de uno u otro rasgo, es la proyección del vector al eje correspondiente - al rasgo de la personalidad o al eje - el factor mental de la creatividad. Así, la mentalidad de la persona concreta quiere esto o no quiere, si pensaría sobre esto o no piensa, está en alguna esfera del espacio mental.

Es evidente que el cerebro de la persona talentosa o genial funciona no como el cerebro de la persona con las capacidades habituales. En el momento actual se desarrollan más intensivamente las direcciones diferentes en la ciencia,  en las que se discuten las preguntas de cuál es actividad del cerebro de los deportistas, como funciona el cerebro de las personas que hacen los actos heroicos. La investigación experimental interesante en esta dirección era realizada por Joan Vikers (Dr. Joan Vickers, University of Calgary).

Dr. Joan Vickers investigando por medio del aparato el que ha inventado la dependencia de las prácticas motoras del jugador extraordinario en golf del movimiento de sus ojos, y estudiando estas dependencias de los jugadores ordinarios, ha descubierto inesperadamente que la diferencia principal del deportista extraordinario del deportista ordinario - en la ausencia de la reconcentración necesaria sobre la pelota en el momento del golpe. El jugador extraordinario el que tiene la maestría alta, es máximamente concentrado en el momento del golpe sobre la pelota al punto determinado de la pelota que hasta después del golpe sus ojos miran como antes solamente a este punto, y después de que un golpe ya es hecho, este jugador conserva el estado inmóvil.

Joan Vickers ha hecho la conclusión que el cerebro no manda la señal al jugador cambiar la posición del cuerpo y la dirección de la mirada de los ojos. El jugador ordinario, no teniendo la capacidad alta hacia la reconcentración, ora mira sobre hoyo, ora mira sobre la pelota para medir el poder del golpe, la distancia hasta el hoyo y la posición del hoyo. Pero este jugador no adivina que el cerebro por falta de la reconcentración exigida se olvida la distancia  hasta la posición de los objetos y por eso su golpe se hace inexacto. Después del golpe el jugador ordinario en seguida dirige su mirada a la pelota que rueda. Esto habla de que a él le falta la reconcentración fuerte en golpe, ya que durante la reconcentración fuerte el cerebro no da la orden apartar la vista. El fenómeno análogo - la ausencia de la reconcentración - Vickers ha notado cuando observaba a un basketbolista profesional el que todo el tiempo tardaba con tiro de castigo, continuamente trasladando la mirada de cesta a pelota y, dilatando el tiempo con tiro, como resultado, en su cerebro se perdía el cuadro espacial el que está en la memoria de corta duración 3-4 segundos. 

Completando la investigación de Vickers, notamos que la estructura informativa semántica en la conciencia del deportista para desarrollarse exige la reconcentración. Como resultado de la reconcentración surge la tensión mental sobre los elementos de la estructura dada, por ejemplo, en su elemento - la pelota. Solamente cuando el pensamiento es concentrado, entonces surge la vía para desarrollar esta estructura. Esto análogamente, como el científico o el alumno decide un problema  matemático, su cerebro se encuentra en el estado de la tensión y la reconcentración, con la condición de que sea la reconcentración necesaria, conseguiría encontrar la decisión. Cuando el pensamiento se agita, el objetivo planteado no está decidido.

¿Cómo se distingue el as aéreo del piloto regular? Ante todo, esto es la habilidad reconcentrarse en la mira al momento necesario del combate. Un piloto combatiente el que ha aprendido máximamente a concentrarse al tiempo necesario sobre el objeto determinado o la tarea determinada, puede reproducir en su memoria de corta duración el cuadro espacial temporal de los objetos que se mueven en el aire. ¿Por qué Pokryshkin y Hartmann derribaban los objetivos a corta distancia? No sólo porque las balas se dispersan y un objetivo derribar es difícil, pero también y por eso que es imposible conseguir el recogimiento alto en el objetivo y exactamente determinar la distancia hasta el avión del adversario, cuando la distancia es grande. Los errores serán demasiado grandes, el cuadro espacial no queda en la memoria y otro cuadro lo desplaza de la conciencia. Por eso la ráfaga pasa de largo. Los pilotos inexpertos jóvenes a menudo se encontraban en tales situaciones.

Cuando el avión enemigo se encuentra en distancia 50-100 metros, para el as aéreo es más fácil reproducir el cuadro espacial temporal en el cerebro de los objetos que se mueven en el aire. Este cuadro está en la conciencia, como era dicho ya más arriba, durante 3-4 segundos. Picando de la altura al avión enemigo, Pokryshkin cerca de su objetivo salía de un picado y se encontraba durante algunos segundos en distancia pequeña del avión del adversario, máximamente concentrandose en la mira en que se encontraba su objetivo.

Él hacía ráfaga y luego, no perdiendo ni un segundo, se elevaba en seguida a ascensión en vertical. Pero habían unos casos, cuando Pokryshkin al derribar un objetivo, no tardando dirigía la mirada a otro, de nuevo extremamente concentrandose en la mira, y derribaba otro objetivo  también. La fuerza de Pokryshkin como el as aéreo consistía en su capacidad excepcional de la reconcentración altísima sobre el objetivo que vuela y la capacidad de fijar en su conciencia el cuadro espacial del episodio dado del combate. El recogimiento del francotirador que se ha escondido en las ramas del abedul y que apunta su rifle al objetivo inmóvil, está claro. Pero como se puede comprender el fenómeno del recogimiento del as aéreo, cuando y él mismo y su objetivo ambos se trasladan mutuamente con las velocidades grandes en el cielo. Esto es otro recogimiento. Se puede llamarlo «el recogimiento rápido», cuando el tiempo para duración de la concentración de la atención hay que medir en segundos y en fracciones de segundos. El piloto tiene que en su cerebro instantáneamente tratar una información y tomar una decisión. Si no tiene tiempo para tomar una decisión, la situación se cambiará y el enemigo se aprovechará de su error. Esta capacidad extraordinaria se desarrollaba constantemente. Aun en tiempo de paz Pokryshkin del fusil de pequeño calibre cazaba a las perdices que volaban impetuosamente de la hierba y obtenía el éxito grande. Los amigos de regimiento, no comprendiendo el sentido de estos entrenamientos se reían sobre Pokryshkin. Pokryshkin desarrollaba en sí la capacidad de presentar el cuadro espacial temporal de los objetos que se movían en el aire, concentrarse en la mira del rifle, instántaneamente reproducir la distancia hasta el objetivo que vuela. Si seguir la teoría de Joan Vickers, aparentemente, en el momento del tiro los ojos del piloto algun tiempo eran fijados al mismo punto sobre la mira hasta un poco después del tiro.

Se sabe que cualquier persona tiene el potencial y la cantidad de la energía mental que son limitadas. La dispersión de la energía mental entre el número grande de los rasgos de la personalidad no permite alcanzar la reconcentración necesaria en la fase última del combate, cuando es necesario asestar el último golpe. Se puede suponer cuales rasgos de la personalidad predominaban en el momento, cuando Pokryshkin asestaba su «golpe de halcón» por el enemigo en la más última fase del golpe, es decir, durante algunos segundos, cuando ráfaga de ametralladora alcanzaba el avión del adversario.

Enumeraremos una serie de rasgos de la personalidad del piloto: la voluntad, la obsesión, la seguridad, el sentimiento del detalle, el sentimiento de distancia, el sentimiento de su avión de caza, la reconcentración en la mira en la que han caído las partes más vulnerables del avión enemigo (un tirador del avión de bombardeo, el motor etc.).

La concentración de la energía mental en este momento del duelo pasa solamente sobre los valores de esos rasgos de la personalidad, y lo que estorba para derribar un avión enemigo, es  desplazado al segundo plano de su conciencia.

Ahora está claro cuales mecanismos en la actividad de la mentalidad explican por qué las esferas de la persona talentosa o genial y la persona con las capacidades habituales en el espacio mental se encuentran lejos uno de otro. Son demasiado diferentes los valores en los factores mentales tienen estas personas, y por eso los extremos de los vectores los que son construidos por estos valores, ocupan la posición diferente en el espacio mental.

Por ejemplo, en el eje «valor-cobardía» dos personas pueden ocupar dos polos extremos. Ya que las personas diferentes tienen los rasgos diferentes de la personalidad, los valores de estos rasgos sobre los ejes del sistema mental de coordenadas se diferencian, y los vectores los que son construidos por estos valores, caen en esferas distintas mentales. Después de la digresión breve en base del metodo estructural-axial es fácil determinar la diferencia de los rasgos de la personalidad del as aéreo de los rasgos de la personalidad del piloto habitual. Sin embargo decir que esta diferencia consiste solamente en los rasgos del carácter y la maestría, entonces casi no decir nada. Es necesario encontrar más profunda distinción esencial entre la maestría altísima y las habilidades habituales. De aquí resulta que las batallas en el cielo pasan no sólo en el espacio físico, sino también en el espacio mecanicístico que es lo opuesto al espacio mental. Los duelos aéreos y duelos de grupo entre los pilotos van y en la conciencia y en el nivel inconsciente, y después se manifiestan en sus maniobras y en conducta de los pilotos en el combate. Hay unas personas que son obsesas por el ataque, son atrevidos, tienen la voluntad fuerte y el comienzo creador. Sobre la guerra estas personas al caer en la situación difícil, atacan intrépidamente, piensan como salir de la posición difícil o desesperada, otros - en la situación difícil son más inclinados a la defensa, son pasivos, se distinguen por propensión a las instrucciones. Sobre esos primeros podemos hablar: estan combatiendo en el espacio mental en el que pelean los maestros superiores de los duelos aéreos.

Un íntegro espacio mental del combate aéreo consiste de la asociación de las esferas mentales en las que pasa la actividad mental de cada participante de la batalla aérea. Una parte del espacio mental es la parte, donde combaten los hombres intrépidos e inclinados hacia el riesgo, otra parte es la parte, donde combaten los hombres que son menos iniciadores. Y ya que para cada piloto estas esferas son distintas y pueden ser alejados uno de otro, de aquí resulta que la distinción de las esferas en el espacio mental en las que pasan los procesos mentales en tomar las decisiones, da la posibilidad de decir: este piloto es el as, y este piloto - es menos experto, es dispuesto más flojamente para el combate.

En el libro «El misterio de la creacion de los genios» fue descrito que hay una esfera limitada de los logros superiores creadores, donde los factores mentales que determinan el don de la genialidad, alcanzan sus valores más altos máximos. Pokryshkin era el maestro insuperado de las batallas aéreas, pero aspiraba no solo a la perfección en el arte del combate, sino también aspiraba a educar a los pilotos, creando de ellos el equipo de ases superiores. Uno de sus objetivos - era conseguir que los pilotos combatan en la misma esfera del espacio mental (en la esfera de la maestría altísima). En esto era el secreto de las victorias de Pokryshkin e su equipo de ases superiores.

El análisis de las operaciones militares de los alumnos de Pokryshkin habla que el conjunto de sus cualidades mentales, los rasgos de sus caracteres formaba tales vectores de la mentalidad los que eran en aquella esfera la que se podía nombrar como la esfera de la maestría superior, la esfera del arte superior de los duelos aéreos.

Ellos comprendían uno a otro en el combate hasta sin palabras sólo por las evoluciones de las alas del avión, y cada uno podía sustituir de cada uno de ellos. La valentía de uno era la valentía de otro, la intrepidez del avión jefe no se distinguía de la intrepidez del avión acompañante y la obsesión en el combate de cualquier piloto de 4 o de 8 aviones dirigidos por Pokryshkin, no era menos que la obsesión de su jefe. Crear el equipo de ases que luchaban en el cielo, eran dispersados por el frente y escalonados por la altura, era lo nuevo en la táctica de la aviación de caza y el logro personal creador de Pokryshkin.

En el fútbol moderno ya hace mucho existe un sistema dinámico del juego el que se llama el fútbol total. La filosofía del fútbol total consiste en la velocidad alta y la intercambiabilidad de los jugadores. Y el defensor y el medio en la situación del ataque rápido pueden hacerse los delanteros, todos son distinguidos por intercambiabilidad, maniobrabilidad y armonía altísima, universalidad de los jugadores y el estilo de combinación de todo el equipo. Se puede decir que todos los jugadores son fuertes ya que se encuentran en una e la misma esfera del espacio mental: todos tienen la velocidad alta, la vista de combinación, el valor, la energía, la aspiración al riesgo y las acciones atacantes.

Para que Pokryshkin pueda crear su equipo de los pilotos de caza, era necesario el proceso difícil mental sensorial, la inspiración y el destello que han sido preparados por la intelección intensa de la experiencia de combate. Las decisiones estandartizadas tácticas se han agotado, todos ellas eran bien conocidas en Luftwaffe y por eso eran ineficaces. Era necesario encontrar algo lo otro y,  al fin y al cabo, la fórmula del combate aéreo era descubierta. En la investigación breve no podemos enumerar y describir muchos casos de la vida de combate de Pokryshkin, donde conseguía usar sus ideas innovadoras en la táctica de la aviación de caza.

Pero algunos duelos aéreos eran tan interesantes que hay que contar de ellos. Las situaciones se cambiaban, pero en cualquier de ellas el piloto talentoso e intrépido podía encontrar el talón de Aquiles del adversario - un lugar, donde la debilidad del adversario reducía a la nada su fuerza numérica.

Esto era el tiempo, cuando la aviación soviética se apoderaba ya su superioridad en el cielo de la guerra. Si quieres retener la superioridad aérea, es necesario paso a paso, lo mismo como esto se realiza en partida de ajedrez, conservar su posición de la presión al adversario y alimentarla por los pasos fuertes posicionales y tácticos.

Una vez Pokryshkin, siendo ya, por el jefe de la división, ha salido con doce aviones de caza de 16 regimiento. Como él se recuerda, tenían que interceptar en el camino hacia el frente el grupo numeroso de los «Ju-87» y «He-111», cerca de cuarenta aviones. Los aviones de bombardeo enemigos han volado a la tarea con acompañamiento del grupo numeroso de sus aviones de caza. Al localizar los aviones del adversario, Pokryshkin toma en seguida la decisión - de repente interceptar la iniciativa y, no tardando ni un minuto, atacar el grupo alemán de los aviones de bombardeo de carrera.

Para los aviones alemanes, como les mostraba su táctica de muchos años, el mejor medio contra el ataque de los aviones de caza era la formación en el círculo defensivo en el que por siempre estaban formando los «Ju-87» y «He-111», ellos rodeaban su espacio aéreo con ayuda de la pared del plomo encandecido. Pero en cualquier táctica de la defensa hay una esfera del espacio en la que la ventaja del fuego denso contrario desaparece. Esto es un lugar en el centro del círculo defensivo en que los aviones alemanes siempre se disponen. Los tiradores alemanas que se disponían en cabinas de los aviones no tenían que disparar al centro.

Disparando al centro esos tiradores arriesgaban derribar sus mismos  aviones, destruyendo todo el sentido de la defensa circular. Pero que los cazas soviéticos puedan irrumpir al centro del círculo, era necesario superar la zona más peligrosa - el riesgo estaba grande, la velocidad de tiro de las ametralladoras que echan alrededor las ráfagas, no dejaba hasta un pequeño chance. La zona alrededor del círculo defensivo debe ser escrupulosamente preparada. Pero con todo hay unas esferas vacías del espacio y hay unos segundos, cuando es posible penetrar y caer al centro del círculo. Picando a esta esfera, los cazas del grupo de Pokryshkina con la velocidad grande se abrían paso al centro del círculo y a quemarropa ametrallaban los «Ju-87» y «He-111».

Pokryshkin no podia olvidar este combate intenso, él lo recuerda en las páginas de su libro: «han ido a la tierra los primeros derribados por nosotros «Ju-87». Cuando yo fusilé el segundo avión de bombardeo, he comenzado a dar vueltas para el ataque siguiente a la derecha, sobre el ala ha brillado la traza de fuego. Al virar brusco me he desviado de ella. La traza se interrumpió de repente. Pasaron corriendo de arriba Sujov y Zherdev. Esto ellos me han ayudado» (18, p. 85). Hasta el automatismo Pokryshkin desarrolló en sí la más valiosa cualidad del piloto - la reacción instantanea a la traza de fuego. El súbito ataque enemigo que provocaba la perplejidad que sentían algunos pilotos, no influía nunca a Pokryshkin, al contrario, él espontáneamente y bruscamente cambiaba la dirección del vuelo y la posición de su caza y la mira del caza enemigo se clavaba inútil a la vacía zona estrecha del cielo.     

 

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